miércoles, 24 de noviembre de 2010

Educación en México... Vista a ras de tierra.

Génesis


Las culturas prehispánicas en México, pese a ser motivo de nuestro orgullo (pues cuando nos sentimos nacionalistas somos la encarnación viva del Popol Vuh, del Quinto Sol o Moctezuma) no fueron tan ajenas a los problemas actuales que vivimos en este país.



Respecto al tema de la Educación, la gran mayoría de estas grandes culturas, que por su naturaleza marcial, beligerante, requerían de un enorme poderío, así como del control total de los súbditos; restringían el acceso del conocimiento a los estratos sociales ligados al poder.




La Tierra Prometida


Tras la llegada de los españoles, la alfabetización se vuelve un elemento inaccesible para el indígena, salvo la "educación" o conversión católica, la capacidad de leer algún texto era privativo de los colonizadores y su descendencia, además por supuesto de los privilegios asociados al control y poder. Digamos que 300 años de segregación e indiferencia hacia los oriundos y el meztizaje resultante


martes, 2 de noviembre de 2010

Chocolate: Mexicano 100% 2a Parte



Remontándonos un poco a la historia del cacao, existen fuentes diversas y grandes contradicciones o desacuerdos, quizá todas tengan un tanto de razón en lo que mencionan; sin embargo, la coincidencia total es que pese a que en América se cultivaba o crecía en diferentes regiones, es en México donde los españoles constatan la importancia y uso que tenía la semilla así como la bebida derivada.

Los españoles la hacen suya y monopolizan por un tiempo su uso y comercialización, sólo que no era un elemento que pudieran mantener aislado, así que conforme crece el conocimiento de la existencia de la bebida en el resto de Europa, también lo hace el interés por consumirlo en diferentes presentaciones, naciendo con ello la industria chocolatera actual, donde se hace presente el adagio mercantil sobre ser el primero brinda la posibilidad del mejor posicionamiento y direccionar el mercado hacia donde el interés personal indique.

Nace a principios del siglo XX el tradicional chocolate con leche en barra por la mejora tecnológica conseguida por la empresa de Henri Nestlé que para ese entonces tenia desarrollada la leche en polvo como "sustituto" de la leche materna (elemento publicitario para los países en desarrollo donde aseveraban a las incipientes madres que era mejor alimento éste que la producida por las propias mujeres).

Siendo Europa el principal consumidor del producto, ahí mismo es donde se desarrollan los adelantos necesarios para hacer crecer la industria, así como posicionarse las empresas suizas como las de mayor prestigio en la fabricación de las golosinas y los productos derivados. Estas mismas empresas son las que fomentan el cultivo del cacao en distintas regiones (principalmente África y Asia) desplazando de esta manera a la región originaria.

Actualmente países de América como son Ecuador, Perú y Brasil, son los que tienen una participación importante en la distribución del mercado mundial como productores de cacao

¿Y México?

Desgraciadamente no pinta como productor pero sí como consumidor, siendo después de EUA, Brasil y Canadá, el siguiente mercado en importancia de América.

No podemos revertir inmediatamente el rumbo que ha adquirido esta actividad o mercado, donde los principales beneficios los obtienen empresas trasnacionales (Nestlé, Cadbury, Roscher, por mencionar algunos), quienes regulan lo que se hace y lo que no, donde quien cultiva y trabaja con sus manos esta semilla no recibe más allá de lo necesario para sobrevivir, mientras los altos ejecutivos no logran decidir cuál auto de lujo usar para ir de fin de semana a una de sus mansiones.

Siguiendo la idea original de este repaso, donde podemos hacer o fomentar cambios primero en lo particular para pasar a lo general posteriormente y en la suma del esfuerzo conseguir un cambio favorable para nuestros compatriotas dedicados a este rubro y nosotros mismos por añadidura, es en lo siguiente:

Cuando hagamos nuestras compras, verifiquemos que el producto que buscamos lo estemos haciendo por un verdadero deseo/necesidad o si estamos respondiendo al reflejo provocado por la publicidad a la que nos vemos sometidos.

Detengámonos a ver si existe un producto dentro de las ofertas nacionales, démosle el beneficio de la duda y atrevámonos a probar lo que ofrecen nuestros compatriotas, es posible que no estén dentro del gusto que hemos desarrollado por los otros productos; lo cual no significa que los nacionales no tengan la calidad o estilo para consumirlos o deleitarnos igualmente.

No olvidemos que las multinacionales han desarrollado su infraestructura a través de mucho años y entre ello está el adiestramiento del gusto en el público consumidor. Una empresa en desarrollo (o supervivencia) difícilmente habrá conseguido cubrir los puntos esenciales de las texturas, pero indudablemente tendrán de gustación más genuina, más acorde a los sabores tradicionales.

Un punto importante en el desarrollo de los productores nacionales (de cualquier ámbito comercial) es la retroalimentación. Si algún punto no está dentro de nuestros gustos o ideas, no se pierde mucho con tomar el teléfono y llamar/mensajear a quien nos vende para hacerle saber nuestra apreciación. Sólo así puede haber cambios concertados o dirigidos según nuestras afinidades. La apatía sólo favorece a los que ya gozan de un sitio en los mercados además de estarles dando el control hasta de nuestras decisiones así como de nuestros gustos.

Apoyemos a estos productores, permitamos que también crezcan como empresa, a la vez que sigan proporcionando y generando empleos tan necesarios en estos tiempos. Una empresa que crece no solo requiere de mano ejecutora sino también de cabezas que piensen, que aporten, de profesionistas, socios, etc. Una acción tan simple como el probar un producto nacional, puede repercutir en muchos ámbitos que nos permitirían eventualmente crecer como país.


Chocolate: Mexicano 100%


Sin duda cada que nos damos a la tarea de leer algún artículo relacionado con la historia de México, específicamente sobre las culturas precolombinas, nos sentimos orondos (orgullosos) al descubrir que muchos productos actuales son derivados de aportaciones de nuestras raíces.

Sin embargo, una sensación de vacío nos invade cuando tratamos de conectar o entender qué ha pasado en el trayecto de los años, cuándo es que se transforma en lo actual, cuándo es que pierde su esencia, etc.

Una de las aportaciones de México (principalmente) al mundo es sin duda el chocolate o más correctamente el Cacao. Originalmente empleado de forma múltiple, pues lo mismo servía para preparación de bebidas energizantes, calmantes, terapéuticas, moneda de cambio, uso ritual, etc, etc.


Es durante la época de los Olmecas (900 AC) que se difunde su cultivo por toda mesoamérica y debido al dominio de las civilizaciones en la región, su uso prevalece sin muchas modificaciones hasta la llegada de los españoles. Posteriormente, la integración cultural con Europa, va creando las modificaciones que han marcado los usos actuales, es decir, el chocolate. Primero en barra (sin alusiones en doble sentido) de distinta formas para preparar bebidas de distintos tipos, después en polvo para darle paso al consumo masivo de bebidas instantáneas y por último los jarabes y n cantidad de productos.

Alguna ocasión leí sobre este tema y por causa de la edad (tendría no mas de 18 primaveras) me sentí no caber en mi mismo de satisfacción de saber que el Carlos V, los chocolates Hershey's, Toblerone y cuanta golosina que circulase a nivel mundial tendría el "sello de casa" y el nombre de México estaría en las mentes de los consumidores... Je! Qué tiempos de inocencia la mía!!!

Con el paso del tiempo y un poco de noción de como se mueve el mundo, pero sobretodo por haber visto personalmente las condiciones que prevalecen en el campo mexicano es que se ahonda la pregunta del ¿Qué pasó con esos sueños gloriosos del orgullo nacional y la repercusión en el contexto global? O más claramente ¿Quién goza de los beneficios por la explotación de estos recursos, además de la fama gratuita o lo que es peor de la usurpación del papel (en muchos lugares el chocolate sólo se concebía si era suizo)?

No es tan complicado, al menos en el mercado nacional, es suficiente con darse una vuelta por los supermercados y tiendas de conveniencia para visualizar que por ejemplo la trasnacional Nestlé, en una labor de hormiga e initerrumpidamente se fue apoderando del mercado de las golosinas, apoderándose paulatinamente de productos y marcas que anteriormente pertenecieron a empresas como La Azteca (como el chocolate de mesa "Abuelita" que por muchos años anunciara la abuelita de México Sara García, el Carlos V y demás).

Todos estos productos han sufrido la debida "transformación" para hacerlos más idóneos para mercados actuales, dependientes todos ellos del soporte mercadológico de los medios masivos de comunicación. Así es posible encontrar un producto que se asociaba a un gusto específico por su sabor característico, convertido en un producto desalineado y sin las particularidades que atraían del mismo pero en múltiples presentaciones. De manera que ahora el chocolate "Abuelita" lo encontramos en polvo instantáneo, en barritas individuales para consumo como golosina y en las clásicas barras para chocolate de mesa pero sin ese sabor "retequebueno" que presumía doña Sara.

Mira uno los anaqueles y ve el sin fin de presentaciones de cada una de las marcas populares y no puede uno sino pensar que este rubor debe estar más que fortalecido.

Triste en verdad es llegar las zonas donde el cultivo de la semilla de cacao ha sido estandarte de la región, motivo anterior de festejos variados y de intercambio cultural tanto con y para los turistas nacionales como internacionales y caer en la cuenta que lo único que se mantiene en estos rumbos es el mero recuerdo de épocas que ya fueron y que materialmente no volverán.

La mayoría de los otroras productores de cacao, han abandonado esta actividad por diversas causas pero la principal es el precio tan bajo que les ofrecen por sus cosechas. Literalmente no sacan ni para la nómina de tantos ayudantes que se requieren.

La combinación de atraso tecnológico, además del cultural ha mantenido al margen a los productores y campesinos nacionales (todo mundo lo sabe), pero cuando eso se adereza con el desplazamiento debido a las importaciones de materiales que antiguamente se producían en estas zonas, simplemente resulta en depresión, abandono y pobreza para las familias que dependían sus recursos de tales actividades.

(fin de la 1a parte, pronto vendrá la conclusión de esta reflexion)